sábado, 17 de agosto de 2013
miércoles, 7 de agosto de 2013
-- Próximo...
Bases para una nueva Carta Magna para un futuro próximo... 2024.
Bases para ello, para modificar las actuales constituciones nacionales, para el mundo que viene, el que les dejaremos a nuestro hijos y a la juventud actual, y sin esperar que deban, en generaciones futuras estar pensando en abandonar, aunque algunos ya lo están haciendo, el planeta, y analizando estos, a cual de los mundos de esta u otra galaxia, la humanidad pueda emigrar.
_______________
Debido a los acontecimientos ocurridos y que ocurren en los países del espacio Europeo,
Sudamericano y de Oriente, cercano, medio y lejano, elaboro esta propuesta a fin de democratizar (si ello es posible) con una mayoría que no aplaste o someta a la, en general casi igual en número, minoría de ciudadanos y habitantes, minoría que no eligió a los gobernantes actuantes o actuales.
Mejorando el sistema de gobierno se provocará como todo cambio implica, una enorme resistencia, en especial en los políticos que ocupan lugares de privilegio y más si son inmerecidos y aprovechados en beneficio propio y el de sus allegados, familiares amigos y demás, que conforman lo que se denomina entre otras cosas nepotismo y por ende traen corrupción de cualquier tipo.
Por esto, ellos* se resistirán no solo a leer esta propuesta sino que la combatirán y execrarán, pero no existe por el momento una educación de los pueblos que permita comprenderla, menos entre los que se dedican a la política, captando votos de la mayor y numerosa población que con su voto les dan el poder de: invocándolos hacer lo que se les venga en gana o antoje, ver la forma de perdurarse, lucrar en exceso, sin medida, para ellos y sus futuras generaciones.
Si se logra llevar a discusión al menos esta propuesta, se tratará con ello de evitar el cambio indebido de reglas en nombre de ese pueblo que les dio un mandato para mejorarlo y no para empobrecerlo, pero es dable considerar una gran mejora con las bases que se proponen.
Las representaciones de los políticos, en general lo son por regiones en cada país, hay que reducirlas, ellos* se opondrán. Los representantes del número de pobladores deben disminuir igual, ellos* se opondrán, es decir aumentar el número de representados hasta un número adecuado, pero que sea una reducción significativa de representantes para así, disminuir los gastos del estado, este, siempre poderoso de todo dinero.
Esto atañe al poder legislativo, el poder judicial se mantiene igual, siempre que se mantengan las bases o principios de la carta magna de Juan sin tierra y del código Napoleónico, con sus 200 años no hace mucho cumplidos y festejados por representantes de varios países, y casualmente no por aquellos que no son muy democráticos sino por el contrario que propenden a una dictadura de una élite, sobre la minoría, no tanto menor y que no los votó como sus representantes, se supone para los entendidos bien intencionados que me refiero a los gobiernos denominados populistas, que gastan dineros que no son de ellos, de los gobernantes, a su antojo para ganar más votos en las próximas elecciones.
Y he aquí lo principal de la modificación de la carta magna: que el Presidente, el que preside, ministro de gobierno, hombre o mujer, sea designado por los representantes de las llamadas cámaras, por amplia mayoría del 75% y surja de entre los hombres y mujeres del mundo o del bloque de que se trate, seres notables por su trayectoria, pero que de ningún modo nativos, ni descendientes hasta en tercera generación, del país que les tocará gobernar, y del cual deberán conocer su idioma en forma fehaciente y fluida, a más del propio de su país natal y otro idioma más, que por la evolución de la época deberá ser el inglés, el cual deberá dominar, además de poseer un título universitario y más aún, un master o doctorado de cualquier especialidad, no necesariamente y por razones obvias de abogacía o leyes, es más, preferentemente que no sea esta su especialidad pues tienden a generar conflictos. Todo esto más sus antecedentes de, por ejemplo haber sido gobernante, dignatario o miembro de cualquier poder en su país o en otro del bloque de uno de los países que le propondrán el ejercicio de la presidencia. Nunca se aceptará un nativo ni inmigrante o residente de más de dos años del país que le propondrá ejercer tan importante cargo menos refugiado o asilado. Además no deberá y eso debe ser bien documentado, es decir demostrado, estar ligado al gobierno en curso, del país al que pertenece como ciudadano nativo.
Por otra parte la duración de su mandato no deberá exceder el del período del los actuales gobernantes del territorio en cuestión. Se considerará su reelección, siempre por amplia mayoría y solo en los casos en que la función que se le encargó sea de éxito con la consideración para ello de los tres poderes, el ejecutivo, legislativo y judicial, y solo en ese caso. De lo contrario se seguirá buscando entre los notables de los países que conforman el bloque. es decir Europa o su equivalente, para ello se les paga a los representantes, tienen tiempo de buscar y analizar, Habitantes sobran, honorables no tanto.
Sigue....
JBCanton
¿Como contratarlo y como pagarlo? Pregunta difícil de responder, más con la base del espíritu de los seres humanos, que unos aman el bronce, otros el oro, el dinero, otros ambas cosas y no se conforman nunca ello es su naturaleza, se debe considerar así, en la transacción en el dicho criollo de que no es lo mismo: “Te compro el poncho que te vendo el poncho”, como ocurre cuando se trata de una única prenda de interés para ambos tratantes de un intercambio, en este caso se tratará de comprar o vender servicios, claro que servicios muy especiales y de alta responsabilidad y riesgo, la seguridad y estabilidad y la felicidad de una población dependerán de la eficacia y por que no decirlo, de la honestidad de todos los responsables del cambio y de las decisiones que requieren estos cambios. Para cambiar el mundo, muchos de los políticos actuales, descendientes al menos en su espíritu o accionar de los reyes o señores feudales, deberán desaparecer del ámbito poítico y trabajar.
*Ellos, son los políticos enquistados y otros.
Bases para ello, para modificar las actuales constituciones nacionales, para el mundo que viene, el que les dejaremos a nuestro hijos y a la juventud actual, y sin esperar que deban, en generaciones futuras estar pensando en abandonar, aunque algunos ya lo están haciendo, el planeta, y analizando estos, a cual de los mundos de esta u otra galaxia, la humanidad pueda emigrar.
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Debido a los acontecimientos ocurridos y que ocurren en los países del espacio Europeo,
Sudamericano y de Oriente, cercano, medio y lejano, elaboro esta propuesta a fin de democratizar (si ello es posible) con una mayoría que no aplaste o someta a la, en general casi igual en número, minoría de ciudadanos y habitantes, minoría que no eligió a los gobernantes actuantes o actuales.
Mejorando el sistema de gobierno se provocará como todo cambio implica, una enorme resistencia, en especial en los políticos que ocupan lugares de privilegio y más si son inmerecidos y aprovechados en beneficio propio y el de sus allegados, familiares amigos y demás, que conforman lo que se denomina entre otras cosas nepotismo y por ende traen corrupción de cualquier tipo.
Por esto, ellos* se resistirán no solo a leer esta propuesta sino que la combatirán y execrarán, pero no existe por el momento una educación de los pueblos que permita comprenderla, menos entre los que se dedican a la política, captando votos de la mayor y numerosa población que con su voto les dan el poder de: invocándolos hacer lo que se les venga en gana o antoje, ver la forma de perdurarse, lucrar en exceso, sin medida, para ellos y sus futuras generaciones.
Si se logra llevar a discusión al menos esta propuesta, se tratará con ello de evitar el cambio indebido de reglas en nombre de ese pueblo que les dio un mandato para mejorarlo y no para empobrecerlo, pero es dable considerar una gran mejora con las bases que se proponen.
Las representaciones de los políticos, en general lo son por regiones en cada país, hay que reducirlas, ellos* se opondrán. Los representantes del número de pobladores deben disminuir igual, ellos* se opondrán, es decir aumentar el número de representados hasta un número adecuado, pero que sea una reducción significativa de representantes para así, disminuir los gastos del estado, este, siempre poderoso de todo dinero.
Esto atañe al poder legislativo, el poder judicial se mantiene igual, siempre que se mantengan las bases o principios de la carta magna de Juan sin tierra y del código Napoleónico, con sus 200 años no hace mucho cumplidos y festejados por representantes de varios países, y casualmente no por aquellos que no son muy democráticos sino por el contrario que propenden a una dictadura de una élite, sobre la minoría, no tanto menor y que no los votó como sus representantes, se supone para los entendidos bien intencionados que me refiero a los gobiernos denominados populistas, que gastan dineros que no son de ellos, de los gobernantes, a su antojo para ganar más votos en las próximas elecciones.
Y he aquí lo principal de la modificación de la carta magna: que el Presidente, el que preside, ministro de gobierno, hombre o mujer, sea designado por los representantes de las llamadas cámaras, por amplia mayoría del 75% y surja de entre los hombres y mujeres del mundo o del bloque de que se trate, seres notables por su trayectoria, pero que de ningún modo nativos, ni descendientes hasta en tercera generación, del país que les tocará gobernar, y del cual deberán conocer su idioma en forma fehaciente y fluida, a más del propio de su país natal y otro idioma más, que por la evolución de la época deberá ser el inglés, el cual deberá dominar, además de poseer un título universitario y más aún, un master o doctorado de cualquier especialidad, no necesariamente y por razones obvias de abogacía o leyes, es más, preferentemente que no sea esta su especialidad pues tienden a generar conflictos. Todo esto más sus antecedentes de, por ejemplo haber sido gobernante, dignatario o miembro de cualquier poder en su país o en otro del bloque de uno de los países que le propondrán el ejercicio de la presidencia. Nunca se aceptará un nativo ni inmigrante o residente de más de dos años del país que le propondrá ejercer tan importante cargo menos refugiado o asilado. Además no deberá y eso debe ser bien documentado, es decir demostrado, estar ligado al gobierno en curso, del país al que pertenece como ciudadano nativo.
Por otra parte la duración de su mandato no deberá exceder el del período del los actuales gobernantes del territorio en cuestión. Se considerará su reelección, siempre por amplia mayoría y solo en los casos en que la función que se le encargó sea de éxito con la consideración para ello de los tres poderes, el ejecutivo, legislativo y judicial, y solo en ese caso. De lo contrario se seguirá buscando entre los notables de los países que conforman el bloque. es decir Europa o su equivalente, para ello se les paga a los representantes, tienen tiempo de buscar y analizar, Habitantes sobran, honorables no tanto.
Sigue....
JBCanton
¿Como contratarlo y como pagarlo? Pregunta difícil de responder, más con la base del espíritu de los seres humanos, que unos aman el bronce, otros el oro, el dinero, otros ambas cosas y no se conforman nunca ello es su naturaleza, se debe considerar así, en la transacción en el dicho criollo de que no es lo mismo: “Te compro el poncho que te vendo el poncho”, como ocurre cuando se trata de una única prenda de interés para ambos tratantes de un intercambio, en este caso se tratará de comprar o vender servicios, claro que servicios muy especiales y de alta responsabilidad y riesgo, la seguridad y estabilidad y la felicidad de una población dependerán de la eficacia y por que no decirlo, de la honestidad de todos los responsables del cambio y de las decisiones que requieren estos cambios. Para cambiar el mundo, muchos de los políticos actuales, descendientes al menos en su espíritu o accionar de los reyes o señores feudales, deberán desaparecer del ámbito poítico y trabajar.
*Ellos, son los políticos enquistados y otros.
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